Estuve leyendo textos de un doctor en teoría política paraguayo llamado Benjamín Arditi, que me parecieron muy interesantes.
De puro "desocupado mental", en los últimos tiempos se me dio, cada tanto, por colgarme a leer opiniones de Tomás Abraham y opinólogos varios que a uno no le aportan nada. Por eso leer a Arditi fue un soplo de aire fresco.
Arditi tiene un estilo bastante "desacartonado" para ser académico, y al mismo tiempo es riguroso.
Aquí pongo enlace a un texto suyo (en inglés). Aquí un video sobre el concepto de "emancipación" y "autonomía".
Para Arditi, toda idea de "emancipación" debe estar articulada con alguna noción sobre "lo imposible". La política ya no se reduce al "arte de lo posible". Luego da una definición formal, mínima, de lo que entiende por "emancipación": surge allí donde encontremos una polémica o un desacuerdo acerca de si las relaciones sociales imperantes dañan o impulsan la igualdad, la libertad y la justicia; y donde hay una polémica acerca de si otro mundo menos opresivo es posible.
El tipo pone el ejemplo de las insurgencias en países de Medio Oriente, donde el petróleo le otorga a los gobernantes una capacidad de comprar voluntades y armamentos que están muy por encima del alcance del pueblo. Ejemplo: en una cárcel de Siria, los torturadores estaban presentes mientras un coronel o general a cargo comía y escuchaba música popular, en tanto detrás de la cortina se torturaba a presos. No es joda, no se trata de la "persecución a Luis Majul", sino de torturas de tinte medieval, una de las cuales consistía en removerle la cara al preso mientras estaba vivo.
Cabe destacar que allí, la gente que sale a protestar sale o desarmada o con armas que no le pueden hacer ni cosquillas a un tanque o a un carro blindado cargado de soldados. La asimetría entre represores y reprimidos en términos de recursos financieros y militares es extraordinaria. Además hay control de acceso de la prensa extranjera que va a cubrir esos casos.
¿Cómo es posible que el pueblo salga a las calles a protestar en esas condiciones? ¿Cómo es posible salir a protestar cuando el costo de decir sí y aguantársela es menor para quienes protestan?
Hay situaciones en que el miedo actúa como agente paralizador, y otras en que no. Lo cierto es que en un análisis de costo/beneficio, la protesta corre el riesgo de tener muy pocos beneficios para tremendos prejuicios (incluyendo torturas y muertes de las que nadie o casi nadie se enterará).
En este tipo de protestas, la política no puede ser meramente "el arte de lo posible", sino que debe haber algún componente de lo imposible. Arditi no se refiere a "lo imposible" en el sentido común: esto no es posible porque nunca pasó; sino que considera "lo imposible" en un sentido político, como el efecto que tiene en el presente algo que no es técnicamente posible desde el campo de experiencia dado pero a pesar de todo impulsa a que la gente actúe como si lo fuera. Lo imposible a veces no funciona como parálisis, sino como estímulo, en tanto anticipación de que lo que está por venir es mejor.
Nota al margen: hay que admitir que a veces la historia demuestra que "lo por venir" puede ser mucho peor, como ocurrió en el caso de Stalin.
Artiti toma un concepto de Deleuze y define la anticipación como "la estructuración del ahora como el tiempo de nuestro devenir otro".
En este sentido, la anticipación no es un futuro todavía no realizado, sino algo que ya ha empezado a ocurrir por el mero hecho de que se está luchando para que ocurra. Allí hay una idea de "utopía" como puesta en acto, y no en su sentido de "no lugar" -a la Tomás Moro- ; una idea de utopía donde el futuro ya comienza a arrojar su sombra sobre el presente, de modo tal que luchar por la felicidad ya es estar más feliz, y luchar por la libertad ya te hace más libre.
Digamos que existen formas de utopía que no necesitan esperar al futuro lejano o a alguna noción de "fin de la historia" para su realización.
Interesante.
ResponderEliminarSe lo puede relacionar con un sentido de la trascendencia, ¿no?
De parte de tu vieja en tanga:
ResponderEliminarHay que tomarse las cosas con humor! Por eso existe ese blog.
En otra ocasión pasaré como Luz simplemente, a leer y comentar este blog.
Saludos!
Estimado Ricardinho, supongo que sí: Pancho Ibañez tenía la posta.
ResponderEliminarArditi tiene influencias de cierto pensamiento "postfundacionalista" (Lefort, Badiou, Laclau). Un texto que cita y para mí te va a gustar es de Norbert Lechner (está la versión en internet):
http://es.scribd.com/doc/32914214/Norbert-Lechner-Los-patios-interiores-de-la-democracia-Subjetividad-y-politica
También la idea de "desacuerdo" de Ranciére, Deleuze, y otros gomas.
Igual mucho no lo leí, voy a comprarme un libro suyo que editó "Gedisa" y te cuento.
Y no escribo más xq Luz me reta (?)
Yo estoy lleno de onda Luz, ¿qué decís? Soy un cago de la risa!!! (?) Este post es medio aburrido, salvo para los que estamos interesados en estas cuestiones. Tengo otros post que demuestran lo pelotudo alegre que soy.
Gracias por pasar gente linda!