martes, 29 de marzo de 2011

"ASESINOS SIN ROSTRO" DE HENNING MANKELL

Henning Mankell (Estocolmo, 1948) es un escritor sueco -casado con la hija de Ingmar Bergman- que se hizo millonario narrando el lado oscuro de la sociedad sueca a través de las aventuras y desventuras de un personaje llamado Kurt Wallander: un detective cuarentón cuya inteligencia no es infalible ni se acuesta con las mejores mujeres ni los caga a trompadas a todos sino que es divorciado/abandonado por su mina y toma café y bebe alcohol y está expuesto a la acidez estomacal y su padre viejo/senil le rompe las pelotas y su hija -que es rubia, joven y linda y mecachendié sale con un negro africano- no le da mucha pelota y...

Ok, si Theodor Adorno viviera posiblemente diría que Henning Mankell es un fiel representante de la industria cultural, pero el filósofo alemán murió hace más de treinta años y yo en cambio estoy vivo y realmente pude disfrutar leyendo “Asesinos sin rostro” (Mördare utan ansikte), el primero de los nueve libros protagonizados por el detective sueco Kurt Wallander. 

Las peripecias de Wallander se leen mejor en invierno -o en días en que hace frío-, y la experiencia mejora todavía más si lo hacemos frente a una taza de café humeante. ¿En qué estudio científico me baso para afirmar semejante cosa? Es lo de menos, pero les juro que es verdad. (Ojo, no creas en todo lo que dicen los medios, ni siquiera lo que digo en este blog: el espíritu crítico y Majul son los que te van a salvar).

Es cierto que hay autores más imaginativos o que escriben mucho mejor, pero son pocos los capaces de lograr que -si se cuenta con tiempo aunque en realidad se lee CONTRA el tiempo y no A FAVOR del tiempo y tal- uno "se enganche" y los lea de un tirón, o de tres o cuatro. Además... ¡admitamoslón (sic)! Uno adora bandas como Radiohead, pero a menudo es más sencillo pasarse el día escuchando a los Strokes que aguantar veinte temas seguidos de Violeta Parra, Roger Waters (disculpas Roger, sabés que te amo), Arcade Fire o King Crimson (ojito que nombré todas bandas que me gustan mucho, ¡no jodan los fundamentalistas!)...

La traducción “gallega” es medio molesta para nosotros los rioplatenses: frases como “si se daba prisa tendría tiempo de bajar al puesto de perritos calientes y comer algo antes de la reunión” nos sugiere imágenes de rropes salchichas a punto de abotonarse en lugar de hacernos visualizar panchos con mostaza y ketchup. De todos modos me pongo en profesor universitario y digo: ¡quedáos tranquilos, hipócritas lectores, la versión de Tusquets es directa del sueco (lo digo por si algún perejil quiere cotejar la traducción con el original ??)!


No cuento en detalle la trama porque pierde la gracia -más aún tratándose de un policial/novela negra-; pero sí digo que básicamente se trata de la resolución del crimen de un matrimonio de ancianos horriblemente torturados cuya víctima mujer antes de morir pronuncia la palabra “extranjero” y entonces Suecia y la globalización y la intolerancia y "será de dió" esto antes en Swedenlandia no pasaba y ahora con la droga está todo más jodido...

Aquí tienen bellos paisajes donde transcurre la obra:


En referencia a la esposa de Wallander, hay un fragmento donde se dice que el protagonista “se dio cuenta demasiado tarde de que ella había preparado su partida con todo detalle. Un viernes le había dicho que quería divorciarse y el domingo siguiente le había dejado y se había ido al piso que ya había alquilado en Malmö".

Ese fragmento me suena verosímil: hombre enfrascado en resolver crímenes sin darse cuenta que mujer está craneando una resolución que luego parece drástica pero no porque fue largamente meditada y entonces la mujer y entonces el hombre y entonces el amor y la imposibilidad del pobrecito detective que se siente un lósa y siente nostalgia de tiempos pasados en donde él y su jermu se amulaban el noema y se entreveraban en hidromurias.

Yo no Leo Messi ni Leo Farinella... yo leo Mankell.

3 comentarios:

  1. Mankell está muy bien. Yo me resistí bastante tiempo a leerlo, por la cuestión de que es un best-seller (prejuicio de joven con pretensiones estéticas) y también porque algunos de los que me recomendaron admiran, por ejemplo, a Luis Majul (y semejante gusto me parecía que no podía hablar bien de ninguna otra opción de esas personas en la vida en general). A fines del año pasado me dije bueno, vamos a ver, y leí "La pista falsa", y hace poco terminé "Los perros de Riga", ambos de la serie Wallander. Los dos me parecieron muy entretenidos. Coincido que habrá escritores más sofisticados, pero en materia de policiales Mankell sabe mucho y hace pasar al lector un muy buen rato. Y con respecto a dos de las cosas que decís: primero, ¡Adorno no te enloquesá!; segundo, es cierto que las traducciones españolas se hacen insufribles, las venimos padeciendo hace bastante con Anagrama, Tusquets y toda esa industria editorial de España que se ha quedado con todo.

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  2. Me gustaría que fuese "Los perros del Níga", porque me haría acordar al Sr Gómez, nuestro querido amigazo. Mi viejo tiene los primeros cinco libros de la serie, con lo cual se los vuá pedir prestados y de a poco los voy a leer. Encima está la serie (una sueca y otra inglesa) que seguro me va a divertir. A la serie sueca la daban por "Film and arts". Te digo más: me leí el primero de la serie Millenium (si Adorno se entera me re caga a trompadas). Jaja.

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  3. no lei nada de Mankell... pero el género policial mucho no me atrae. Saludos!

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