sábado, 31 de agosto de 2013

LA IRONÍA NO SIEMPRE ES LIBERADORA

Estuve leyendo Conversaciones con David Foster Wallace, donde el escritor estadounidense dice algunas cosas piolas sobre cierta capacidad tiránica, incluso corrosiva, del uso de la ironía en nuestra moderna sociedad de consumo.

Casi desde antes de nacer, hemos sido bombardeados por mensajes plagados de giros sarcásticos, conductas cínicas e ironías disfrazadas de autenticidad. Nos criamos viendo programas muy buenos, como Los Simpsons, Padre de Familia o South Park; aunque alguna vez, la atracción adolescente por el sarcasmo nos pudo hacer pensar que personajes como Pettinato o Lanata eran tipos piolas.

Sin embargo, para Wallace, la ironía estadounidense se basa en no tomarse los sentimientos demasiado en serio, lo cual puede ser corrosivo más que liberador. En cierto modo, el uso de la ironía refiere a la sugerencia de que "no estoy diciendo en serio lo que estoy diciendo".

La ironía actual usualmente esconde "el terror de parecer sentimental o melodramático o manipulativo de una forma anticuada. (...) Mientras se finge que la ironía en sí misma no es manipulativa, se utiliza rigurosamente para vender productos".

En fin, los dejo con dos citas que me dejaron pensando:


"El sarcasmo, la parodia, el absurdo y la ironía son formas geniales de quitarle la máscara a las cosas para mostrar la realidad desagradable que hay tras ellas. El problema es que una vez desacreditadas las reglas del arte, y una vez que las realidades desagradables que la ironía diagnostica son reveladas y diagnosticada, ¿qué hacemos entonces? La ironía es útil para desacreditar ilusiones, pero la mayoría de las ilusiones desacreditadas en los Estados Unidos ya se han hecho y rehecho. Una vez que todo el mundo sabe que la igualdad de oportunidades es una bobada, ¿qué hacemos ahora? [...] Aparentemente todo lo que queremos hacer es seguir ridiculizando las cosas. La ironía posmoderna y el cinismo se han convertido en un fin en sí mismas, en una medida de la sofisticación en boga y el desparpajo literario. Pocos artistas se atreven a hablar de lo que falla en los modos de dirigirse hacia la redención, porque les parecerán sentimentales e ingenuos a todos esos ironistas hastiados. La ironía ha pasado de liberar a esclavizar. Hay un gran ensayo en algún sitio que contiene una línea acerca de que la ironía es la canción del prisionero que llegó a amar su jaula" (David Foster Wallace)

La otra es del Corvino:

Radiohead me salvó de Pergolini. Una vez lo escuché reírse de “No Surprises”. No recuerdo por qué, lo consideraba un bajón o algo así, seguro que prefería Limp Bizkit. Y ahí pensé: “Este tipo es un idiota”. Evaluación que fue comprobada a través de los años. Hoy pienso que Pergolini le hizo mucho más daño a la cultura que Tinelli. Soy de los que creen que alguien con un micrófono y una gran audiencia tiene cierta responsabilidad. Pergolini les vendió mierda a sus fans haciéndola pasar por un producto inteligente y elaborado. Detrás del envoltorio cool se escondían la misoginia, la homofobia (pregúntenle a Leo García), la anti política, el clasismo y la música mala. ¿Existe algo más ridículo que hacer compilados de funk y reggae? ¿Cuál era el gran avance de Cuatro Cabezas? ¿Mover rápido la cámara? ¿Ponerse anteojos de sol? “Ruocanpop, exclusivo ruocanpop”. Qué pedazo de tilingo, por dios. Por si fuera poco, llenó el espectro mediático de discípulos, conductores cancheros que no saben nada pero se ríen de todo, mientras ejercen un cinismo propio del colegio Secundario. Tinelli, en cambio, no engañó a nadie, jamás pretendió aparentar más de lo que era. Era una mierda en 1990. Es una mierda ahora. Y dentro de 20 años también.

domingo, 25 de agosto de 2013

ENTREVISTA A MARTIN BECERRA

Acá, una muy buena entrevista a Martín Becerra, acerca de la ley de medios. Lo que sugiere Becerra, aunque suene obvio, es que la democratización de la palabra es un concepto lo suficientemente amplio e importante como para reducir la cuestión a una pelea con el Grupo Clarín.

sábado, 24 de agosto de 2013

UNA HISTORIA CHINA


Érase una vez un pintor que llegó a viejo, luego de dedicar toda su vida a un único cuadro. Una vez que lo hubo terminado, invitó a los amigos que todavía le quedaban para mostrarles su obra: en ella se veía un parque, y entre los prados un estrecho camino que conducía  a una casa situada en lo alto de la montaña.

Cuando los amigos, listos para dar su opinión, se giraron hacia el pintor, éste ya no estaba junto a ellos. Miraron de nuevo hacia el cuadro: estaba ahí, recorriendo la suave pendiente del camino; abrió la puerta de la casa, se paró un momento, se volvió, sonrió, les dio nuevamente la espalda y cuidadosamente cerró tras de sí la puerta dibujada.

FIN


Aquí, otro post "chino".

Y si quieren "música china" hecha en Bernal, acá tienen un tema de un gomía de la infancia.

miércoles, 21 de agosto de 2013

¿ME QUERÉS DECIR PARA QUÉ CANEJO DEBO LEEER FILOSOFÍA? EXCURSUS

El filólogo y helenista alemán Hermann Diels confesó cierta vez: “Ich schätze mich glücklich, dass es mir vergönnt war, den besten Teil meiner Kraft den Vorsokratikern widmen zu können”. Que traducido al castellano sería “me considero afortunado/dichoso de que me hayan dado el poder de dedicar la mejor parte de mis fuerzas a los presocráticos”. Semejante declaración, en una sociedad donde para muchos ser gordo es un crimen y ser un burro algo simpático, no deja de parecernos un poco extravagante. ¿Se puede ser dichoso leyendo filosofía? ¡Pero claro que se puede!


A mí me parece que cuando dejamos de vivir en estado de incertidumbre y nos acostumbramos a la seguridad de la pelotudez cotidiana, se nos va muriendo una parte del ser. Nunca está de más luchar contra la cultura del zapping:


“Estoy con vos, pero en cuanto me aburro, le mando un mensajito de texto a otro. No podemos estar juntos sin hablarnos, no podemos confrontar nuestro aburrimiento. La posibilidad de aburrirnos es intolerable, ya que todos vivimos en una pantalla de televisión y ahí el tiempo es tirano. ¡Que no nos manden a la tanda!”. (Fabián Casas dixit)


Hay gente que necesita rodearse de aparatos encendidos, porque el interior de su ser está desenchufado. Para mí, una persona culta es la que menos dinero y parafernalia externa necesita para no aburrirse. A menor cultura, más derroche, más pirotecnia, más ritos, porque se requieren más recursos para amoblar un ser que está semi-vacío.

¿No les molesta cuando le están contando algo trascendente a un interlocutor que nos presta atención a medias, porque se distrae cada tanto mandando mensajitos de texto?


Pues justamente, una de las cosas que la lectura te puede dar es experiencia. La lectura es de las pocas cosas que te permiten “escuchar con los ojos a los muertos”, a los autores que ya no están pero que nos han legado sus vivencias. La educación no existe para hacernos creer que el mundo es inmutable o que estamos predestinados, sino para que conozcamos las experiencias y los aportes de quienes nos han precedido.


A mí la verdad es que me pudre el intercambio con personas que “no dejan huella”, que son “personas trámite”, como la coca cola: bebida destinada al olvido, al presente puro, que apenas calma la sed. Me gustaría conocer gente que se parezca un poco al vino, que deja huella, que es capaz de producir un trastorno. No sé si me estoy explicando bien, pero tal vez es tarde y ya tenga demasiado sueño.


Si puedo, el fin de semana me gustaría terminar de escribir lo que tengo ganas de escribir sobre qué cuernos es la filosofía.


¡Sean felices!

PD: los dejo en compañía de Fernando Pessoa:

"La lentitud de nuestra vida es tal que no nos consideramos viejos a los cuarenta años. La velocidad de los vehículos nos ha quitado la velocidad de nuestras almas. Vivimos muy lentamente, y ésa es la razón por la que nos aburrimos tan fácil. La vida se ha tornado un campo para nosotros. No trabajamos lo suficiente y fingimos que trabajamos demasiado. Nos movemos muy rápido desde un punto en donde nada se hace hasta otro donde no hay nada que hacer, y llamamos a esto la prisa febril de la vida moderna. No se trata de la fiebre de la prisa, sino de la prisa por la fiebre. La vida moderna es un ocio agitado, un apartarse agitado del movimiento ordenado".

sábado, 17 de agosto de 2013

ENTREVISTA IMAGINARIA A SERGIO MASSA



¿Mostaza o mayonesa? “Mostaneza”. ¿Mayonesa o ketchup? “Me re cabe la salsa golf” ¿Capriles o Maduro? “Mmm, mandriles. Son bichitos simpáticos los mandriles, ¿no?”.¿Rock o tango? “Escucho de todo un poco, soy variado en lo musical. El bolero también me gusta, y mi sobrino, que es fanático del heavy metal, me lo trata de inculcar, aunque todavía no me convence del todo”. ¿Cuál es su estrategia de juego en el TEG? “Pongo algunas fichitas en cada continente” ¿Lanata o Fantino? “Los dos, cada uno es bueno en lo suyo”. ¿Cuál es su modelo de país? “La gente no quiere que le digan cómo hacer las cosas, sino paz, consenso, trabajo, que le resuelvan los problemas, que hagan algo con la inseguridad”. ¿Pero cómo piensa hacerlo Sergio? “Mirá, trabajamos con mucho empeño y dedicación para hacer un mejor país”. ¿Pero cuál es su política económica? "Mirá, estamos trabajando todos juntos para lograr mejorar el empleo y la inversión". ¿Le gustaría que el FMI nos dicte la política económica? “Mirá, yo escucho a todos. En este país es necesario más diálogo y menos intolerancia. ¿Le gusta el fútbol? “Sí, aunque no me cabe el fanatismo ni la violencia. Tenemos que lograr que la familia vuelva a los estadios. La idea es plantar una semillita en terreno fértil para que pueda germinar, así los argentinos podemos mirar las flores cuando crezcan".